Seguro que a todos nos ha pasado que hemos tenido que abordar un proyecto importante en nuestra vida, y esto puede ser tanto en lo personal como en lo profesional. Para ambos casos lo primero y más importante es entender el alcance del proyecto. Antes de empezar, debemos entender completamente lo que nuestro cliente o equipo espera del proyecto y por supuesto de nosotros mismos.

Tras haber investigado y analizado el mercado y la competencia y cualquier tendencia relevante en cuanto al proyecto, podremos comenzar con él. En este caso voy a hablar sobre un proyecto de diseño gráfico. Debemos entender el mensaje que queremos transmitir, tener claro nuestro público objetivo y cualquier requisito específico que se nos haya pedido.

Estableceremos objetivos y metas claras, primero definiremos dichos objetivos y lo que queremos lograr con nuestro diseño. ¿Se trata de aumentar el reconocimiento de marca? ¿De mejorar la comunicación? ¿De qué se trata?

Una vez hecho todo este estudio previo e importantísimo, nos pondremos unas pautas y unas fechas de entrega personales (es decir, para nosotros mismos) para llegar sin problema a las fechas de entrega estipuladas por el cliente. Normalmente, estas fechas “internas” entre yo y yo misma, suelen tener un margen de una semana. De este modo nos aseguramos de llegar sin problema en el caso de que haya algunos cambios o modificaciones de última hora.

Una vez tenemos todo esto claro nos pondremos “al lio”, crearemos borradores y prototipos con las herramientas que mejor manejemos. En mi caso yo suelo utilizar illustrator. Una vez tengamos unas ideas sólidas, comenzaremos a experimentar con diferentes elementos visuales para obtener retroalimentación.

Vamos a saltarnos todo el proceso de creación, este dependerá por supuesto del proyecto. El proyecto puede durar semanas, meses o incluso años dependiendo de la magnitud de este.

Los últimos pasos son de mis preferidos, refinamiento e interacción. No te conformes con la primera versión del diseño. Continúa refinando, confía en tu juicio profesional y pregunta a tu círculo más cercano. Aunque parezca que no, todas las opiniones son válidas, y muchas de ellas pueden abrirte los ojos.

Una vez finalizado el proyecto, lo entregaremos de forma ordenada y profesional, Asegúrate de que todos los archivos necesarios estén correctamente preparados y listos para su uso.

Por último, después de que el diseño haya sido implementado, realiza un seguimiento de su desempeño y evalúa si se están cumpliendo los objetivos establecidos. Esto te ayudará a aprender de la experiencia y a mejorar tus habilidades para futuros proyectos.